Hace años, Kawasaki rompió el mercado con el lanzamiento de la Z750. Retomando el espíritu de las Z anteriores, la marca de Akashi dio una vuelta de tuerca con la Z750, una moto de estética muy agresiva, con un funcionamiento muy agradable y con un precio moderado. El resultado fue claro: un modelo líder en ventas durante varios años.
Sin embargo, en 2013 Kawasaki decidió ir un paso más lejos y presentó la evolución de la Z750. Esta evolución, que no dejó a nadie indiferente, era la Z800. Los ingenieros de Kawasaki partieron del mismo concepto pero renovaron en profundidad tanto el motor como el chasis, la electrónica y la estética. Es en estos puntos donde mayores diferencias podemos encontrar entre la Z750 y la Z800. Empezando por lo más visual, la Z800 tiene una estética más afilada, deportiva y agresiva que la Z750, aunque está claro que en este sentido, es cuestión de gustos personales decidirse por una o la otra.
Si pasamos al apartado del motor, encontraremos una de las grandes diferencias entre los modelos, ya que la Z800 cubica 806cc y su motor nos entrega 113CV. Esta mejora del motor, que comparte la base del propulsor de la Z750, dota a la Z800 de un carácter más deportivo y de una mayor vida a la hora de exprimir la moto. Además, una de las diferencias clave entre los dos modelos de Kawasaki es que la Z800 tiene un modelo que es limitable para el carnet A2, la Z800e, mientras que su predecesora no puede ser limitada.
El otro gran aspecto en el que la Z800 es mejor que la Z750 es el chasis. La evolución vino de la mano de nuevos tirantes que le aportan mayor rigidez y compacidad. De esta manera, junto con las actualizaciones en suspensiones y frenos, la Z800 mejora sustancialmente la estabilidad y el manejo en curvas y frenadas.
Por último, la otra gran diferencia que tenemos que tener en cuenta a la hora de decantarnos por la Z750 o por la Z800 es el precio. Además de que ya de partida la Z750 era más barata que su sucesora, el hecho de que sea más antigua y que esté descatalogada ha llevado a una bajada de su cotización en el mercado de segunda mano. Es una moto barata y que cumple de sobra con las necesidades cotidianas de una moto de esa categoría. Por ello, si nuestro objetivo es reducir el presupuesto, la Z750 es una gran opción. Si por el contrario preferimos dar prioridad a las mejoras técnicas y estéticas, nuestra mejor alternativa es la Z800, aunque tengamos que apretarnos más el cinturón.
