La esencia de la competición es la de trabajar para intentar ser el mejor, en el caso de las motos, en pista. Obviamente, para conseguir los resultados hay que trabajar duro y no solo es cuestión de pilotos. De todas las marcas que encontramos en MotoGP son dos las que están luchando por llegar al nivel del resto: KTM y Aprilia. Ambas han sido las últimas en llegar a la categoría y aunque han ido progresando e incluso la firma austriaca consiguió un podio con Pol Espargaró bajo la lluvia del GP de la Comunitat Valenciana, todavía están trabajando por recortar la distancia.
Esta pretemporada se vio como tanto unos como otros habían logrado dar un interesante paso adelante. Entonces, cuando todo estaba preparado para empezar, llegó toda la crisis sanitaria que estamos viviendo todavía y se paralizó el arranque del campeonato. Con esta paralización llegó después la congelación en la evolución como medidas para ahorrar costes, una medida en la que ambos constructores tenían una ventaja respecto a sus rivales al tener puntos de concesión.

Con ellos han podido seguir trabajando en este tiempo buscando solucionar los problemas detectados en los test, en el caso de Aprilia de fiabilidad del nuevo motor que se mostró rápido pero frágil. Así pues, aunque con la factoría parada, en Noale siguieron trabajando y lo seguirán haciendo hasta el 29 de junio. Esto no ha sentado muy bien a KTM, que a través de Pit Beirer ha mostrado su disconformidad lanzando dardos a los italianos. De echo, de sus palabras se deduce un enfrentamiento a la hora de acordar las limitaciones que se publicaron el pasado viernes.
El máximo responsable de KTM en MotoGP no ha dudado en afirmar, tal como recoge Autosport que: «Este no es el momento de pensar en ti, así que nos opusimos a la solicitud de Aprilia de continuar desarrollando el motor» para añadir «Pero parece que lo ven de otra manera». Beirer además ha afirmado que «KTM cumplirá nuestra palabra y no tocará el motor. Las otras fábricas se comprometieron a congelar el desarrollo y nosotros, que nos beneficiamos de las condiciones, también teníamos que aportar algo. Por eso decidimos comprometernos a no tocar el motor tampoco.»
Unas acusaciones llamativas puesto que Aprilia está cumpliendo las normas impuestas para una temporada que, sin duda, será diferente. Veremos qué consiguen unos y otros en una batalla que se espera sea intensa y en la que cada milésima cuenta. Como apunte final, hay que recordar que en 2021 se correrá con las motos preparadas para 2020 aunque tanto KTM como Aprilia podrán evolucionar la próxima temporada.