La gama Street Triple se amplía con la llegada de la versión R, una versión muy equilibrada y menos radical que la RS que probamos en Cartagena hace cuatro meses. El propulsor tricilíndrico en línea de 765 cc Euro 5 declara una potencia máxima de 118 CV a 12.000 rpm con un par máximo de 77 Nm a 9.400 rpm. Dispone de embrague asistido antirrebote, caja de cambio suavizada más precisa y accionamiento semiautomático (up & down). La respuesta del motor es más directa, gracias a una reducción del 7% en las inercias rotacionales internas.
Respecto a la Triumph Street Triple R 2019 las principales modificaciones pasan por la adopción de una nueva carrocería más agresiva, angulosa y minimalista centrada en las nuevas ópticas frontales LED, el deflector-parabrisas con toma de admisión, colín con aperturas laterales, quilla afilada y protectores de radiador rediseñados. Retrovisores y puente de manillar también son diferentes. El sistema de escape se ha optimizado y ahora ofrece un sonido más ronco y característico.
A nivel bastidor, mantiene un conjunto chasis doble viga/basculante de aluminio con suspensiones Showa (horquilla invertida BPF de 41 mm y amortiguador con depósito separada), acompañado de pinzas de freno delanteras radiales Brembo M4.32 y neumáticos Pirelli Diablo Rosso III. Las ayudas a la conducción presentes en esta Street Triple R integran acelerador electrónico, ABS, control de tracción y triple modo de conducción (Rain -100 CV-, Road y Sport). La instrumentación es mixta analógico-digital LCD y Triumph declara 168 kg en seco.
Interesante también es la versión «R Low”, con el asiento rebajado de 82,5 cm a 78 cm de altura respecto al suelo, para facilitar la accesibilidad y el control a los usuarios más bajitos. La Triumph Street Triple R 2020 está disponible por 9.700 € en dos nuevos colores: Sapphire Black y Matt Silver Ice, ambos con detalles en rojo y plata, con fileteado de llantas y subchasis rojo.
