Asistimos en el interior de la provincia granadina a la presentación internacional que organizó Honda para mostrarnos su versión de la Africa Twin 2018, incorporando una serie de mejoras que representan un notable avance tecnológico en pos de un modelo más afinado, y más polifacético también.
Empezamos por el aspecto más vanguardista, el digital, que en esta versión 2018 se presenta más variado y completo, con tres características del motor a regular por cuatro modos distintos de conducción. Los repasamos a continuación de una forma somera.
La entrega del motor se ofrece ahora en tres escalas, resultando la primera (3) progresiva y asequible incluso para manos que todavía no han desarrollado un tacto fino, mientras que la más directa (1) transmite un contundente empujón en la parte final del cuenta revoluciones, con un aullido incluido brotando de la admisión.
El freno-motor, un recurso imprescindible en la competición de velocidad pura, llega también ahora en la Africa Twin 2018 como un sólido aliado para una conducción más segura, reteniendo en las reducciones del cambio de marchas con tres posibles intensidades; añadiendo, en la versión con el cambio DCT de Honda, un golpe de gas automático provocado por la centralita justo en el momento anterior al de la entrada de la marcha más baja.
El Control de Par (comúnmente nombrado como control de tracción), amplía ahora hasta 7 sus niveles de intervención, graduándose en una escala exactamente proporcional, ofreciendo además la posibilidad de desconectarse. Los modos de conducción fijos son 3, más uno denominado User para programar los tres parámetros al gusto de cada motorista.
El modo Tourer representa el más deportivo, por así llamarlo, con la entrega del motor en el nivel 1, el freno motor en el punto medio (2) y el Control de Par en el 6, que aparece por defecto con este nivel en todos los modos. El modo Urban, con la entrega en el 2 y el freno motor también en el 2, representa el intermedio. Y finalmente el modo Gravel, que selecciona la entrega más suave (1), el freno-motor en el menos intrusivo (3) y, como hemos dicho, el control de tracción en el 6 por defecto.
Más innovaciones
Dejando al margen el apartado estético, que ofrece ahora cuatro decoraciones diferentes, la nueva Honda Africa Twin 2018 incorpora una pantalla TFT más grande, que aporta cinco nuevas cifras para ampliar una información que se lee sin dificultad, por ejemplo, sufriendo una presbicia de dos dioptrías.
La 2018 también es algo más ligera, rebajando en 2,3 kilos el peso con respecto a la versión anterior, gracias a la incorporación de una batería de litio, en lugar de la convencional a base de plomo. Un nuevo escape se suma a la lista, con un silencioso de tres cuerpos internos, en lugar de los dos anteriores, ofreciendo como resultado un rendimiento más eficaz en general.
Además de ello, las estriberas del pasajero, que antes podían molestar en algunos movimientos conduciendo de pie, ahora se fijan sobre unos soportes que modelan su silueta para sobresalir lo menos posible del cuerpo de la moto, además de ofrecer la posibilidad de desmontarse fácilmente.
Rematando este paquete de innovaciones, Honda subraya su tradicional preocupación por la seguridad incorporando ahora un dispositivo que enciende automáticamente las luces de emergencia cuando efectuamos una frenada severa a más 55 km/h.
Off Road de serie
Unas de las conclusiones más valiosas que pudimos extraer de la presentación internacional que preparó Honda para mostrarnos esta versión 2018 fueron precisamente las derivadas del campo. Con un modelo que arrancó en el siglo XXI para actualizar el mito nacido en los ochenta, la marca del ala dorada creó la maxitrail que probablemente ofrecía las cualidades más todo terreno del mercado, hasta que llegó la reciente aparición de su prima hermana, la Honda Africa Twin Adventure Sport. Así pues ese carácter fuera de asfalto tendría que brotar sin duda sobre la pista de grava y tierra mojada por la que nos tocaría transitar, a la sombra de la Sierra de Loja, para llevar a cabo un test off road sobre una unidad de la Africa Twin estándar calzada con los mismos Bridgestone Trail Win que monta de serie.
Nada más arrancar, nos ponemos en pie para conducir así y sin más, con una facilidad de lo más natural sobre esta Honda Africa Twin 2018, para percibir desde el primer momento cómo su esbeltez facilita sorprendentemente la conducción erguida, con el repertorio de movimientos que exige tanto el sorteo de algunos obstáculos del camino, como los subibajas y desplazamientos con los que la moto evoluciona sobre el terreno.
Hemos seleccionado en el modo User la entrega más directa del motor (1), y aun así la tracción se siente muy dosificable en el puño, mientras movemos el régimen del motor sobre los dos primeros tercios del cuentarrevoluciones para descubrir cómo la rueda trasera puede deslizar graduando su desplazamiento fácilmente, a poca mano que se tenga, y compensándolo con el balanceo de los hombros y de la cintura; todo ello sin olvidar que vamos pisando sobre un neumático mixto y no de taco abierto; en definitiva sobre una cubierta apropiada para la lluvia, para asfaltos rotos o muy castigados, desde luego, pero no para la tierra blanda y la grava esparcida.
En el momento de girar sobre un ángulo de la pista, las 21 pulgadas de la rueda delantera se cobrarían su tributo sino fuera porque la ergonomía de esta moto permite meter la rodilla al depósito con facilidad, lo mismo que desplazar todo el cuerpo hacia el interior de la curva, con lo que llevarte la moto hacia los entresijos del viraje resulta una tarea bastante sencilla.
En el capítulo de las aceleraciones, lo mismo que en la marcha a un ritmo vivo, la nobleza off road de esta Africa Twin se deja notar pisando sobre la tierra mojada o con las ruedas abriéndose paso por esa grava suelta del camino. La moto se mueve y se desplaza lateralmente, sí, y también se deja sentir cierta flotación en el manillar y bajo las estriberas, pero su inercia natural hace muy fácil mantener la trayectoria, a pesar de esta blanda sensación sobre el terreno, que no viene dada por otro motivo que el comportamiento de los neumáticos de serie.
Para recapitular este apartado off road, podemos decir que, si tomamos como referencia la unidad de la Adventure Sport que pudimos probar inmediatamente antes, calzada con neumáticos de tacos y con sus suspensiones más largas y su setting off road puro, esta versión estándar con ruedas de serie no pierde la cara, ni siquiera con el control de tracción desconectado, haciendo un paso por la pista de tierra más que digno incluso muy divertido, porque en ningún momento llegamos a sentir que la moto pudiera descomponerse, perdiendo la trayectoria.
Por último en este apartado, señalar que Honda amplía la gama de calzado para el campo de sus Africa Twin, ofreciendo ahora como opción los Bridgestone Battlax Adventure A41, además de los Dunlop Trailmax 610W que ya tenía en catálogo.