Últimamente hemos estado viendo preparaciones en las que la potencia y los excesos eran la norma. Trabajos que han estado centrados especialmente en conseguir el mayor rendimiento, pero con menos intensidad en lo que a la parte estética se refiere. En esta ocasión, esta preparación de una Suzuki GSX1400 también hay un obvio trabajo en la parte técnica, pero también en la parte estética.
Precisamente, centrándonos en esos esfuerzos de la parte estética, rápidamente podemos observar el hecho de que la moto ha sido despojada por completo de todos los elementos estéticos de serie para pasar a ser una moto naked en el sentido más estricto de la palabra. El guardabarros delantero es mucho más pequeño, los plásticos del asiento han desaparecido e incluso el propio asiento es totalmente diferente y con un pequeño colín al finalizar, realizado en alcántara. Incluso el faro es mucho más pequeño que en el modelo original, aunque mantiene su forma circular e incrustado, eso sí, en una pequeña careta, añadiendo después dos focos más en los laterales que son los encargados de las luces de cruce.
Aun así, estéticamente lo que más llama la atención es que dentro de ese minimalismo hay detalles como el cambio de depósito y la pintura, inspirada en la que empleaban las motos de Suzuki en los años 60, y detrás de la que están los miembros de Purpose Built Moto. De hecho, esta empresa de origen australiano, ha llevado la preparación de la moto un paso más lejos, haciendo que menos sea más gracias a detalles como sacar el escape justo por medio de ese colín tan retro y la vez tan evocador.
Hay que decir que la base de la moto ya se presta bastante a este tipo de preparaciones porque, por ejemplo, el hecho de llevar doble amortiguador trasero de serie ya ayudaba y mucho en el plano estético para darle ese toque retro. Aunque se aprovechó para poner unos nuevos y mejores amortiguadores. Pero luego están el sinfín de cambios que podemos considerar técnicos y estéticos a la par, y que terminan de imprimirle el carácter retro. Ese es el caso del subchasis fabricado a medida, o de las bombas de freno Brembo que le dan un extra de seguridad.
Hay que decir que la mecánica no ha sido potenciada en este caso, pero sí muchos otros accesorios de la moto como son el portamatrículas, peculiar donde los haya, el cambio del manillar y la elección de puños Domino, los indicadores LED, o los ya mencionados faros también LED. Sin duda una moto llamativa, aunque sus creadores dicen que todavía es mejor cuando uno se sube en ella. Lástima que no tengamos esa oportunidad…