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Prueba chaqueta Hevik Paride: ligereza veraniega

Fotos: SMN
Cuando el calor aprieta y los termómetros pasan (muy) de largo los 30 grados, la tentación de ir en moto sin chaqueta es grande. Evítala con una prenda como esta ligera Hevik, que incluye protecciones de calidad en hombros y codos.

Hevik nos trae una chaqueta ligera de verano perfecta para cuando nos visitan las olas de calor. Cuando ves tantas personas andando en moto por ciudad ¡y en carretera! sin chaqueta, porque según dicen tienen calor, tienes claro que no saben cuánto quema el asfalto en caso de caída… Una chaqueta como ésta, muy ligera pero con protecciones, es lo ideal para poder rodar seguro.

En el caso de la Hevik Paride nos ha gustado encontrar protecciones homologadas en hombros y codos. Son elementos desmontables construidos en espuma densa, pero además de su presencia es importante que el fabricante de la prenda haya diseñado bien sus patrones para que las protecciones reposen, en posición de marcha, donde deben estar. Así es en la Hevik, cuya tela sintética además de fina es resistente, y no vibrará con el aire aún andando rápido. Menos nos ha gustado la espaldera original, en realidad un trozo de espuma: en ese hueco por lo menos podremos montar una más robusta si queremos proteger mejor nuestra espalda. Dado que muchos motoristas usan mochilas con protecciones, puede ser práctica esta solución para no encarecer el producto innecesariamente.

Forro interior de la chaqueta Hevik Paride

La chaqueta es corta, de talle deportivo o slim fit, en color gris muy claro con inserciones amarillas reflectantes. Un punto criticable es la escasez de bolsillos: solamente dos, exteriores (no estancos) y no muy grandes. Hevik debería pensar en incluir bolsillos interiores en esta chaqueta, y de paso mejorar los velcros y cremalleras, que nos parecieron de calidad mejorable. Sí que trae de serie un forro interior fácilmente desmontable: es una película plástica que, plegada, podremos llevar en cualquier parte y que en caso de lluvia convertirá la chaqueta en un chubasquero.

No nos pareció que transpirara mucho cuando la probamos en seco, y sí cortaba el aire, así que es mejor desmontarla para uso con calor, salvo que nos pille una mañana más fresca de lo normal en verano. Es algo que pudimos comprobar y que nos ayudó alguna vez. En la práctica esta chaqueta nos ha resultado una buena solución: ajusta muy bien y es de colores muy visibles (aunque se ensucia más fácilmente al ser tan clara). El cuello puede dejarse corto o algo más alto, una buena idea para evitar insectos o quemaduras del sol (nuca) si no llevas pañuelo.

Velcros de ajuste de cintura/muñeca en la chaqueta Hevik Paride

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