Tras su irrupción en el mercado a través de sus modelos Road Star y Flat Tracker, con su aspecto cafe racer vintage y retro, el fabricante chino se prepara para el lanzamiento de nuevos productos de corte más contemporáneo, abriéndose a un nuevo segmento, en este caso el sector trail. Y arranca con una moto básica, la Adventure 400, una monocilíndrica con diseño moderno y atractivo.
Su orientación turística es evidente, porque viene dotada de voluminosas maletas metálicas de 35 litros de capacidad cada una, y un* depósito de gran capacidad, 20 litros*, lo que asegura una larga autonomía. Cuenta con un motor monocilíndrico de cuatro válvulas y refrigerado por aire, de 397 cc, derivado del modelo Five Hundred. La mecánica es muy básica, pero proporciona una potencia de 29 CV a 7.000 rpm, con un par motor de 31 Nm a 5.500 rpm. Una de las virtudes de la Adventure 400 es su ligereza y manejabilidad, ya que solo pesa 151 kilos.
La llanta delantera es de 19 pulgadas y la trasera de 18. Las suspensiones están encomendadas a Fast Ace, con una horquilla convencional con barras de 43 mm de diámetro y un recorrido de 210 mm, y detrás un monoamortiguador sin bieletas, con un recorrido de 200 mm. La altura al suelo también es notable, y el asiento es alto, nada menos que 880 mm, lo que invita claramente a realizar escapadas más allá del asfalto.
En cuanto a su precio, no hay nada oficial, pero se habla de que podría estar claramente por debajo de los 6.000 euros, lo que la convertiría en una trail “low cost”.