Publicidad
[the_ad_placement id="adsense-mega-2-mobile"]

Cómo vestir en moto o scooter: chaqueta, guantes y casco

Fotos: fotoAgencia
Durante estas semanas hemos visto todas las ventajas que plantean los scooter para moverse eficazmente a lo largo y ancho de la ciudad. Pero estas virtudes no evita que tengamos que ir correctamente equipados, tanto para protegernos del clima como para minimizar las consecuencias de un eventual accidente.

Hace años, pensar en equipación específica para circular en un scooter era casi una tarea imposible. Los fabricantes estaban centrados en ropa para motos deportivas, emulando a los monos de cuero que podíamos ver en los circuitos y dejando de lado otras vestimentas.

Pero con el paso de los años, los nuevos tejidos, la investigación y la apertura del mercado de la moto en el que los scooter ya representan más de la mitad de las ventas anuales, los fabricantes de equipamiento comenzaron a sacar productos pensados para el entorno urbano que combinan protección y estilo.

La equipación imprescindible para el scooter

Si pensamos en la vestimenta que debería ser imprescindible para utilizar nuestro scooter no debemos obviar, como mínimo, tres elementos: casco, guantes y chaqueta. Todo lo que sea no llevar alguna de ellas haría que además de incómodos, no fuésemos lo suficientemente protegidos ante una eventualidad.

A continuación vamos a ver, de una manera general, las posibilidades que tenemos dentro de cada una de las prendas en función de nuestras necesidades o nuestros gustos.

Casco

El casco es un elemento imprescindible, aunque sea sólo “para ir aquí al lado”. Protege una de nuestras partes más débiles, la cabeza, de cualquier tipo de golpe porque, incluso una caída desde parado, puede ser muy dolorosa: simplemente esencial.

Las posibilidades que tenemos donde elegir son muchas, por ejemplo en función del clima donde residamos, el uso que le demos a la moto o nuestras preferencias. Así disponemos de cascos abiertos tipo jet o demi-jet que suelen contar con una pequeña pantalla para evitar que el aire nos moleste en los ojos. A favor está en que la visión periférica es mayor que con otros cascos así como su comodidad en días calurosos. Por contra, su protección en caso de accidente es menor.

Los cascos integrales protegen completamente nuestra cabeza y rostro aunque, por contra, en circulación urbana en la que se hagan paradas frecuentes son más calurosos e incómodos de quitar y poner. También ocupan más espacio y no todos caben en los huecos que hay debajo del asiento de los scooter. Este es un tema muy importante a la hora de elegir nuestro próximo scooter.

Por último tenemos los modulares o convertibles que aúnan las ventajas de los cascos abiertos (su mentonera es practicable) con la protección de los integrales en posición cerrada. Por contra, son más voluminosos y pesados que los integrales debido a sus necesidades de fabricación.

En cualquier caso, lo ideal es que disponga de cierre por doble anilla “D” en lugar de usar automático o cierre micrométrico, pues es más seguro. Que sea ligero también es importante pues, si vamos a usarlo durante mucho tiempo, puede legar a fatigar nuestro cuello. Un acolchado interior desmontable facilita la limipeza con el paso de los kilómetros.

Chaqueta

Al igual que en el caso de los cascos, en las chaquetas hay mucha variedad. Pero como decíamos al comienzo, no pensemos en chaquetas de colores llamativos y llenas de pegatinas. Hoy en día hay fabricantes como Tucano Urbano por ejemplo, que ofrecen prendas que a simple vista parecen normales.

Sin embargo estas prendas, cuando las observas en profundidad ves que están desarrolladas para circular en moto, pero que una vez te hayas bajado, puedan pasar perfectamente desapercibidas. El corte del patrón corresponde con el de una chaqueta normal pero lleva protecciones internas en codos, hombros y hasta espalda así como tratamientos repelentes al agua que evitan que nos mojemos en caso de lluvia.

Podemos encontrar una chaqueta que cumpla nuestras necesidades, habiendo soluciones en modelos cortos (cazadora), de tres cuartos, tipo abrigo, en tejidos de los más variado desde cordura a cuero pasando por tejidos artificiales, así como orientadas al verano con grandes paneles ventilados en forma de rejilla o específicas para el invierno.

En cualquier caso, siempre es interesante que cumplan un mínimo de requisitos como incluir zonas reflectantes, múltiples bolsillos, etc. Las mangas también son importantes ya que algunas son demasiado anchas a la altura de la muñeca y debes usar el guante por debajo en lugar de por encima en invierno, por ejemplo, con menor aislamiento frente al aire. Si poseen forro desmontable, nos permitirán tener una prenda todo uso para utilizar indistintamente en casi cualquier estación.

Guantes

Si pasamos a hablar de los guantes, además de la lógica que nos dicta que hay guantes orientados al invierno o al uso veraniego que evita que nuestras manos literalmente se cuezan en su interior, también podemos clasificarlos en dos subtipos: cortos y lagos.

Esta división se realiza en dónde acaba el guante, si justo en la muñeca o bien son más altos, tomándonos unos pocos centímetros en el antebrazo y evitando que en una caída, esa parte del brazo pueda quedar expuesto contra el asfalto.

Se fabrican en cuero o cordura, con protecciones en la zona de los nudillos y refuerzos en la palma de la mano que además de aportar comodidad, también evita roces contra el asfalto. Pueden estar más o menos ventilados en función de su material o fabricación así como llevar tratamientos impermeabilizadores. El ajuste más común a la muñeca suele ser por velcro.

Con ellos puestos, lo más importante es no perder la sensibilidad sobre las manetas, manteniendo así algo de tacto a la hora de actuar sobre los frenos. Unas palmas con material antideslizante para no resbalar nunca están de más. En la actualidad algunos modelos llevan incluso un engomado en el dedo pulgar, que hace las veces de limpiaparabrisas para poder retirar el agua de la pantalla del casco cuando llueve mucho.

Otra equipación recomendable para el scooter

Aunque las prendas que os hemos comentado antes son las imprescindibles para circular en scooter por ciudad, si tenemos que adentrarnos en autopista o carretera en nuestros desplazamientos cotidianos, es recomendable que la completemos.

Actualmente podemos vestir nuestra parte inferior del cuerpo con pantalones que, como en el caso de las chaquetas, combinan materiales específicos para moto con un look actual y desenfadado. No siempre vamos a pensar en una pequeña caída pero, incluso en movimiento, el continuo azote del viento que mueve las prendas que no son ceñidas debilitan los tejidos y acaban rompiéndolas.

Los más comunes son los pantalones vaqueros con protecciones blandas en las rodillas y refuerzos de Kevlar en aquellos sitios más expuestos a los golpes. Pueden incluso tener tratamientos repelentes al agua. Su corte es el de un vaquero normal y su comodidad similar a los de unos jeans, para que puedas vestirlos sin llamar la atención.

Por último no debemos olvidarnos de nuestros pies y usar botas de media caña que sujeten el tobillo y eviten así mismo que los podamos perder en marcha. Los cordones tampoco son recomendables porque el nudo puede desatarse y engancharse en alguna pieza móvil de la moto: velcro o tipo boa son los más seguros.

De nuevo los fabricantes hoy en día nos ofrecen calzado casual, básicamente deportivo, idéntico a los que podríamos utilizar para dar un paseo o para salir con los amigos a cenar. Lo bueno es que no llaman la atención y ofrecen un plus de seguridad sin que por ello perdamos ni un ápice de comodidad. Suelen contar con protecciones en los mismos lugares que las botas de moto, es decir, en talón, empeine y tobillo.

Lo último

Lo más leído