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MotoGP Le Mans 2017: las claves del GP

Fotos: Youtube/Equipos
Con una meteorología revuelta pero un día de carreras perfecto, Yamaha conseguía su victoria número 500 en el Mundial. Fue gracias a Maverick Viñales, aunque a punto estuvo de ser Valentino Rossi quien lo consiguiera. Su caída, y la de Márquez, marcaron un GP que ya empezó muy accidentado en Moto 3...

El GP de Francia se presentaba algo complicado para los pilotos de MotoGP. Había previsiones meteorológicas variables y un asfalto nuevo que sólo algunos pilotos de MotoGP habían probado poco antes de la carrera en una sesión de entrenamientos. Allí estuvieron todas las Yamaha pero sólo Cal Crutchlow de Honda, en un circuito tradicionalmente favorable a las motos de la marca de los diapasones.

Los entrenamientos respondieron a las expectativas: empezaron con lluvia pero tanto FP2 como FP3 se desarrollaron con la pista húmeda y con parches de agua. En esas condiciones los más rápidos fueron pilotos con neumáticos lisos slick, pero no todos pudieron sacar provecho de ellos. El resultado, un reparto casi rocambolesco para las sesiones de entrenamientos clasificatorios: ver a Dani Pedrosa y Jorge Lorenzo último y penúltimo de estas sesiones es como poco chocante, pero no eran los únicos oficiales a disputar las dos plazas de la Q1 que daban acceso a la Q2 y las primeras filas de la parrilla del domingo. Al final, primera fila totalmente Yamaha para Maverick Viñales (pole), Johann Zarco (esperado héroe local del día) y Valentino Rossi.

Maverick Viñales logró en el GP de Le Mans 2017 la victoria número 500 de Yamaha en Grandes Premios

Domingo sin agua

El día de la carrera amaneció seco y quienes no había conseguido unos buenos entrenamientos sabían que podrían tener su oportunidad en carrera. Dani Pedrosa era quizás el “tapado” más claro: su tiempo en Q1 le hubiera valido para un puesto digno en parrilla (pero le superaron Zarco y Dovizioso y así es el reglamento actual…). Y, sobre todo, dejó claro en el Warm Up (la breve sesión de entrenamientos del domingo) que era rápido. La elección de neumáticos no parecía muy crítica, aunque de los posibles líderes sólo Johann Zarco apostó por salir en carrera con la opción más blanda delante y detrás. Sabía de los entrenamientos que podía gestionar su duración y, a fin de cuenta, debía arriesgar algo en “su” Gran Premio.

Las Honda, después de brillar en el GP de España, no parecían en tan buena forma como en Jerez. Las primeras vueltas tras la salida dejaron claras las ganas de Zarco de hacerlo muy bien delante de su público, y rodó en cabeza desde la primera chicane. Le seguían las dos Yamaha oficiales de Viñales y Rossi, y los tres rodaban a un ritmo inesperadamente rápido para lo que se había visto en entrenamientos.

Mientras las Yamaha Movistar parecían esperar que Zarco agotara sus ruedas blandas, Márquez intentaba no perder de vista las motos azules. Tanto lo intentó, que acabó yéndose al suelo en la rapidísima curva a derechas de final de recta: perdió la rueda delantera pero por suerte fue de forma más suave y con una caída mucho menos violenta que la vista el día anterior de Jack Miller en el mismo punto. El campeón intentó seguir, sin éxito: lleva ya dos “ceros” en cinco carreras… ¿demasiado? Ya veremos.

Viñales, Rossi y Zarco, los más fuertes en el GP de Le Mans 2017

Detrás de Márquez ya estaba Pedrosa: salía el “12+1” en parrilla y el número esta vez le trajo suerte, como veremos. Tras dos vueltas Dani ya rodaba séptimo y, aunque tardó un poco más en librarse de Andrea Dovizioso y Cal Crutchlow (en este caso con un adelantamiento más “físico” de lo normal en el fino piloto catalán), no tardó en asomar por detrás de Márquez poco antes de la caída de Marc.

Pero la emoción estaba delante. A la vista que Zarco no bajaba su ritmo, Viñales había decidido pasarle para intentar la escapada. No tuvo éxito, pese a sus esfuerzos y batiendo varias veces el récord de vuelta rápida, la pizarra de Maverick siempre mostraba a Zarco detrás suyo a menos de un segundo… Y, pegado al francés, Valentino Rossi esperando su momento. El desenlace se produjo a pocas vueltas del final: Valentino decidía pasar a Zarco y lo hacía en la chicane, con autoridad. A partir de ese momento se ponía a rodar a ritmo de récord, dejaba atrás a un sorprendido Zarco que seguía en tiempos muy rápidos también, y cazaba en pocas vueltas al (apenas) escapado Viñales, para pasarle con igual autoridad que al francés en la chicane de final de recta.

Faltaban tres vueltas para el final y pese al rápido ritmo de Rossi, Viñales no se daba por vencido: en la última vuelta podía pasar cualquier cosa. Y pasó cuando Rossi intentó una trayectoria defensiva en una frenada sin llevar tan cerca a Viñales, que aprovechó el hueco para colarse. A partir de ahí, Maverick confesó que no pensó en otra cosa que en tirar al máximo y esperar, seguramente, un inevitable “toque” en la última curva… Pero no llegaron a eso: Valentino no quiso que se le escapara su compañero después de su error y, al forzar demasiado el ritmo, se caía quedando fuera de carrera como Márquez. Zarco conseguía un buen premio (segundo) delante de su público y Dani Pedrosa un premio doble al subir al podio y ponerse segundo, detrás de Viñales, en la provisional del Mundial.

Morbidelli camino de la victoria en el GP de Le Mans 2017

Moto2 y Moto3

La carrera de Moto2 empezó controlada por el autor de la pole, Tom Luthi, a quien el líder del campeonato Franco Morbidelli nunca dejó escapar totalmente. Por detrás de ellos Alex Márquez aguantó el ritmo pese a una lesión en el tobillo fruto de su caída del día anterior. El protagonista de la carrera fue de todos modos Francesco Bagnaia, que después de remontar alcanzó al trío de cabeza y acabó por escaparse junto a Morbidelli. Los dos se jugaron la victoria final, aunque el del equipo VDS siempre mantuvo cierta ventaja (de décimas de segundo). Un error llevó a Luthi a la posición trasera del grupo de cabeza, pero en las últimas vueltas Alex Márquez bajó su rendimiento claramente (la lesión empezó a notarse) y Luthi se aseguró la posición del podio. Sin la caída del sábado, posiblemente habríamos visto un nuevo duelo Márquez-Morbidelli por la victoria.

La mañana empezó como es habitual con la carrera de Moto3, aunque lo que ocurrió en la segunda vuelta no tuvo nada de habitual. Tras la salida se cayeron tres pilotos en la chicane y uno de ellos (Jakub Kornfeil) volvió a pista sin darse cuenta de que el cárter de su moto estaba roto. Regó varias curvas, pero el problema se hizo obvio cuando la cabeza de carrera pasó por la curva La Chapelle (rápida y en bajada), donde se cayeron casi veinte motos… La necesaria bandera roja dio lugar a una segunda salida y a una carrera más corta. Jorge Martín (autor de la pole) y Romano Fenati (en primera fila) fueron los primeros en liderarla, pero el piloto madrileño sufría una caída que dejaba al italiano escapado en cabeza. Joan Mir logró remontar desde su posición en la parrilla y se puso a rodar, segundo, a ritmo de récord para alcanzar al escapado Fenati. La presión hizo su efecto y Romano Fenati se caía intentando mantener la distancia. Esta caída, y la anterior de Jorge Martín, más la ya “fácil” victoria de Joan Mir, dejan al mallorquín líder de la provisional y con 36 puntos de ventaja. Detrás suyo fue Aaron Canet el más rápido del grupo perseguidor para subir al segundo escalón del podio.

Joan Mir, ganador del GP de Le Mans 2017 y nuevo líder del Mundial de Moto3 2017

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