Mejor sincronizados que el ballet ruso, Ducati anunció la baja de Rossi diez minutos antes de que Yamaha emitiera un comunicado para hacer oficial su retorno al equipo de los diapasones. Todo este despliegue está de más, la decisión del 46 estaba tomada desde hace mucho tiempo y todos los acontecimientos han ido a favor del regreso hacia la fábrica que le convirtió en inmortal.
Lo único que ha quedado claro en estos dos años del “rey” en su periplo ducatista es que no ha perdido ni un ápice de popularidad, los fans y patrocinadores le siguen (Yamaha necesita uno desesperadamente). Además de que nadie que no se llame Stoner ha sido un piloto ganador con la Desmosedici. Con estas pobres conclusiones y pese a los desorbitados esfuerzos de Ducati por mantenerle, Valentino les deja. Estaba claro desde la carrera de Qatar en abril, la primera y casi última del año para Valentino.
La reacción del 46 al finalizar la carrera, criticando su moto hasta superar los límites de lo ético, fue una declaración de intenciones. Valentino saldría de Ducati por lo civil o lo criminal, se rumoreó que estaba estudiando romper el contrato de manera unilateral. Desde entonces no se habla con Filipo Preziosi dejando claro que sus malos resultados tienen una componente de moto y otro claro de motivación, como él mismo dijo: “… no me voy a jugar la vida para hacer quinto”.
Se dice que en toda pareja siempre hay uno que quiere más que el otro. Ducati siempre quiso más a Vale de lo que Vale quiso a Ducati. Los esfuerzos de la fábrica por satisfacer los deseos de su estrella han sido innegables, pero la falta de feeling con la moto y con el equipo de desarrollo ha pesado más para Valentino. Él sabe que le quedan un par de años y no los va a gastar desarrollando la moto, ni haberle fabricado 4 motos en año y medio, ni los 17 millones de euros de contrato, ni la destitución de Preziosi y Claudio Domenicali como ha pedido son garantías suficientes para ganar carreras, y sin esas garantías no tenían nada que hacer. El 46 les deja mucho peor que como se los encontró, una “japonizada” Desmosedicci con un chasis de doble viga en lugar de su monocasco y sin un rumbo claro hacia donde llevar el desarrollo. Además se especula con que Yamaha se lleva el patrocinador de Ducati, Phillip Morris seguiría a Valentino en su nueva etapa y esto en tiempos de crisis es un golpe muy duro. Desde luego los ducatistas no le van a tener en gran estima.
Yamaha le espera con los brazos abiertos, la fábrica de donde nunca debió salir, a Vale y a sus patrocinadores porque una ex-novia siempre te pasa “una factura” cuando quieres volver y es posible que acaben pintando la moto de rojo “Malboro”. Pero todo esto es muy bueno para Yamaha, una vez Lorenzo dio su bendición al fichaje la cosa estaba hecha y Lin Jarvis, jefe de Yamaha y uno de los tipos más inteligentes del paddock, se puso manos a la obra para conseguir el mejor dúo de pilotos para encarar los dos próximos años.
Eso sí, está obligado a estar entre los 3 primeros en cada carrera, si no lo consigue, sería un sonoro fracaso. Pero eso es solo el principio porque lo que el rey persigue es el título mundial por encima de ganar carreras. Pero para conseguirlo ha de superar a Lorenzo y eso son palabras mayores. No hablamos de dos pilotos, hablamos de dos autenticas pirañas en busca de carreras y títulos, no se van a dejar amedrentar por nada ni por nadie. Entre los dos consiguieron la triple corona en 2008, 2009 y 2010, un equipo de ensueño para los próximos dos años siempre que sepan negociar con sus egos. Aunque cuando andaban “a la gresca” los resultados para Yamaha fueron inmejorables.
Es justo resaltar la valentía de Jorge Lorenzo, podría haber vetado el fichaje de Valentino dejándole sin una moto competitiva. Sin el 46 y sin Stoner los próximos años, a la espera de la explosión de Márquez en MotoGP, los campeonatos hubieran sido previsiblemente suyos. Pero el valiente Lorenzo abre la puerta de la fábrica que ha hecho suya al piloto que le intentó echar por todos los medios, no entiende de rencor ni de cobardías. Bravo por Jorge.
Creo que a Valentino no se le ha olvidado ir en moto y acabará entre los 3 primeros en los test de post-temporada en noviembre. El campeonato necesita su regreso, más si cabe después de la retirada de Stoner. Necesita duelos que nos vuelvan a hacer saltar en nuestros asientos y con él en Yamaha están garantizados, su regreso a una moto competitiva es una buena noticia para todos los que amamos este deporte seas seguidor de quien seas.
El que fuera rey indiscutible de MotoGP ha vuelto para reconquistar su trono, veremos si Lorenzo mantiene su posición o cede en la lucha. ¡Que ganas tengo que empiece 2013!
