La empresa MSI, especializada en estudios de mercado, organiza periódicamente sus reuniones del Club de Previsión del mercado de Motos. En su vigésimo séptima edición, además de repasar cifras de ventas pasadas y previstas o la situación económica, el tema a tratar y debatir era mujeres y motos. Si el 30 por ciento de coches los conducen mujeres en España, solamente un 12 por ciento de “dos ruedas” (motos y ciclomotores) los llevan chicas, cuando son la mitad de la población (aproximadamente). De hecho, no es ningún secreto que el mundo de las motos es muy masculino, incluso en la competición a alto nivel las piloto brillan por su ausencia (salvo contadas excepciones).
Carnés y edades
Para intentar explicar de forma razonada esto, hay que acudir a las estadísticas y cifras disponibles. Lo primero, la obtención de carnets de conducir. Si vemos la evolución en los últimos diez años, vemos que en los hombres aumentó la demanda de carnet de moto a partir de 2011, se aceleró en 2014, y ha caído ligeramente desde 2016 cuando alcanzó un pico de 120.000 licencias emitidas en ese año. Las cifras de mujeres son más modestas, y muy estables hasta 2014 (unos 20.000 permisos al año). En 2014 sí se aprecia un crecimiento hasta unos 25.000 carnés que se mantiene hasta 2017.
El análisis por edades de esos carnés de moto obtenidos por mujeres es curioso. Las más “activas” (que se sacan más carnés) son las menores de 24 años: en torno a 10.000 desde 2010. Pero la gráfica muestra bastantes variaciones y MSI lo interpreta como cierta “lucha”. Las mujeres jóvenes pueden depender de su familia y quizás les cuesta convencerles de sacarse el carné, de ahí que no haya una evolución o cifras estables. Aparece pues el problema cultural: pocos padres animan a sus hijas a montar en moto, o lo hacen mucho menos que a sus hijos.
En cuanto a las otras franjas de edad, de 25 a 39 años es la siguiente de mujeres que más carnés de moto obtienen. Bajo desde unas 8.000 en 2010 hasta 6.000 en 2013 y remonta desde ahí hasta algo más de 8.000 desde 2016. Muchos menos permisos sacan las mayores de 40 años: apenas 2.000 al año entre 2010 y 2014, con un claro repunte en ese año hasta casi 4.000 desde 2015. Como vimos, desde 2014 unas con otras (salvo las más jóvenes) se han animado más y se sacan más carnés, lo que suele significar que también compran moto y “las vemos” o las veremos.
Tipos de moto
¿Moto o scooter? Si nos fiamos de la publicidad de las marcas, usan más mujeres en anuncios de scooter (bastantes) que de motos (muy raro sobre todo de cilindrada mediana y alta). La realidad es que hasta 45 años sí hay más mujeres usando scooter que hombres, porcentualmente. Y cuanto más jóvenes, más diferencia existe, es decir, las mujeres jóvenes tienden más al scooter que los hombres (que prefieren las motos cuanto más jóvenes son). Posiblemente los hombres más jóvenes sean más “pasionales” (moto) y las mujeres más prácticas (scooter).
Esta tendencia se equilibra en la franja de 46 a 50 años, y se invierte a partir de ahí. De hecho, lo hace con incluso más claridad que en la parte anterior. O sea: las mujeres moteras mayores de 50 años prefieren mucho más las motos que los hombres, frente a los scooter.
Más información curiosa aparece cuando estudiamos encuestas sobre el uso de la moto o las motos eléctricas. En cuanto al uso, la reciente puesta en marcha de servicios de moto-sharing permite un estudio de sus usuarios. La mayoría son hombres, pero el porcentaje de mujeres que prefieren alquilar es más alto que el de las que compran. Justo al contrario que los hombres, que prefieren comprar a alquilar.
En cuanto a las eléctricas, las mujeres se muestran más reacias a comprar una que los hombres. Les parece que tienen suficiente autonomía, pero también les parecen poco potentes, con poca variedad, pocos lugares para cargarlas, y en resumen que deben mejorar.
¿Veremos más moteras?
Para las cuatro invitadas, procedentes de todos los ámbitos (marca, tienda y taller, prensa y usuarias), sí. La llegada de la mujer a las dos ruedas con motor es imparable y creciente. También es lo que indica el ritmo de obtención de carnés (en crecimiento). Los frenos son los tradicionales: en las familias no se suele incentivar el uso de la moto de padres a hijos, y todavía menos cuando son las hijas.
Las marcas de motos por su parte deben hacer un esfuerzo para aprender a dirigir campañas y productos (motos y scooter de cualquier tipo) a las mujeres con mensajes positivos y prácticos, menos sexistas que hasta ahora. Y lo mismo con el equipamiento, pues no hay las mismas posibilidades para ellas (catálogos mucho menores). Las preguntas “tipo” de las mujeres interesadas en las motos, a otras que van en moto, son si la moto en cuestión “pesa mucho” y si “es muy alta”. Pues la mayoría ni pesan tanto ni son tan altas… y muchos hombres bajitos las usan, sin ser tampoco unos hércules. Como salió en la charla: si Dani Pedrosa puede ir tan rápido con una MotoGP, muchas chicas podrían estar ahí si tuvieran su talento.
¿En la calle? Sí, seguro que iremos viendo más chicas en moto cada día. Tantas jóvenes que se han sacado el carné irán llegando a todo tipo de motos y, como sabemos, cuando pruebas las dos ruedas no hay vuelta atrás. Nuestros antepasados andaban sobre cuatro patas hasta que se levantaron y aquí estamos.
