Publicidad
[the_ad_placement id="adsense-mega-2-mobile"]

La nueva normalidad

Nuestro sector no tiene tan mala perspectiva
Fotos: SMN
Estamos ya saliendo de la crisis del coronavirus, pero lo que vendrá después no será como antes. Muchas cosas van a cambiar y por suerte el mundo de la moto tiene mucha mejor perspectiva que otros.

Después de más de dos meses confinados, cuando escribo estas líneas empieza a verse la luz al final del túnel. Pero para mi sorpresa todavía quedan bastantes personas que creen que “todo esto” (la crisis del coronavirus) ha sido algo temporal, una pesadilla, sí, pero de la que despertaremos y todo volverá a ser como antes. Que en un año lo recordaremos ya como algo lejano, como un “te acuerdas”. Pues me temo que no será así: esta crisis, al contrario que alguna otra, sí que va a cambiar el mundo en muchos aspectos. Como comenté al principio de la pandemia con algún amigo, esto va a traer cambios inesperados, pero va a acelerar otros cambios que se veían venir pero no terminaban de llegar.

Muchos de estos cambios no van a ser puntuales, van a ser “estructurales”, es decir definitivos y sin vuelta atrás. Ahora ya entendemos por qué en Asia la gente se pone mascarillas cuando tiene catarro, por ejemplo, y eso ya ha llegado para quedarse. El transporte público no podrá nunca más presentar aquellas imágenes de aglomeraciones y, como poco, perderá la mitad de sus usuarios por más que algunas “autoridades” se empeñen en negar la mayor y fomentar algo indefendible. Habrá más gente moviéndose a pie o en bicicleta, pero habrá más motos: una buena noticia para nuestro sector. Ya lo comenté en mi anterior columna de hecho y nada ha cambiado, al contrario, vamos hacia eso. 

motos_y_scooter_y_bicis_en_ciudad_4

Como motorista “pasional” yo también prefiero ser único y sentirme de un colectivo exclusivo, incluso privilegiado. Pero sé que ver más motos circulando es mejor para todos. Así fue desde 2004 cuando la convalidación del carné de coche y las 125, aunque algunos lo veían mal. Pero gracias a eso se vendieron muchas más motos y la llegada de esos nuevos motoristas trajo mejores (y más baratos) seguros, y más respeto. Ahora vendrá una “segunda oleada” con alguna contrapartida (velocidades más limitadas) pero seguro que con ventajas, y como sector, o industria, son muy buenas noticias

Habrá más cambios estructurales. En la forma de trabajar, ya lo estamos viendo la mayoría. Hay empresas reformando sus oficinas para distribuir de otra forma los puestos de trabajo, dejando muchos menos de los que tenían antes… porque sanitariamente es necesario y porque no los necesitaban allí. Tener al trabajador en su casa resulta más económico y más eficiente… y acaba dedicando muchas más horas a la empresa, aunque también tiene más tiempo para sí mismo. Y tiene un efecto secundario importante: minimiza el tráfico, sobre todo en horas punta. El teletrabajo era una revolución pendiente en España y el coronavirus nos ha hecho dar el salto. 

Motos y bicis, reinas de las ciudades a partir de ahora

Otros cambios no serán tan positivos: para el sector hostelero, o el turístico, es una catástrofe de proporciones todavía no conocidas. Si los viajes en avión cambiaron mucho después de los atentados del 11 de septiembre, ahora llega una nueva vuelta de tuerca: mascarillas, menos servicios y libertad en vuelo, más impedimentos… y, seguro, precios más altos. Viajar va a ser más complicado y mucho más caro, y eso aparte de una catástrofe para el sector turístico me parece un desastre para la humanidad, porque creo que no existe otra experiencia en esta vida mejor: viajar, además culturiza mucho.

A cambio, y volviendo a nuestro terreno, sí podremos viajar en moto y eso va ganar importancia. Como bien recomendó mi amigo Marcel hace poco además viajar en moto a destinos locales o nacionales hará que nos ayudemos unos a otros. Y también culturiza.

Relacionados

Lo último

Lo más leído