Aunque el batacazo en cuanto a ventas ha sido muy grave debido al coronavirus, parece que poco a poco todo recupera una «aparente normalidad«. Ya se ha notado levemente en las ventas de Europa, aunque estamos lejos de cifras como las de hace un año. Pero la necesidad de viajar protegidos da ventajas al uso de la moto, y ello lo ven con entusiasmo en KTM.
Stefan Pierer, en una entrevista a Le Repaire Des Motards, tiene un enfoque optimista. De hecho han contratado en fábrica a 40 personas más, lo que da muestras de que han tenido que hacer frente a un aumento de la producción por encima del habitual.
Sobre cómo afrontó KTM la crisis, Pierer hablaba del hecho de que al ser una marca global, pudieron ver rápidamente lo que estaba ocurriendo y tener en cuenta un posible cierre.
«No hubo nada inesperado. Como compañía internacional, tenemos contactos y conexiones en todo el mundo y vimos muy temprano que había algo que estaba interfiriendo con las ventas en los mercados asiáticos. Cuando estos problemas se trasladaron a la cadena de suministro italiana donde se fabrican las piezas que ensamblamos aquí en Mattighofen, ya había planeado detener la producción a partir de mediados de marzo.»
KTM está viendo además como ve aumentadas sus ventas en Estados Unidos, sobre todo de motos offroad gracias a que allí el tema del uso en campo es más permisivo.
«Con un gasto de menos de 10.000 euros, puedes escapar del coronavirus en cualquier momento, puedes hacerlo solo sin preocuparte por la distancia social, puedes dejar los riesgos relacionados con la densidad urbana y dar un paseo en el campo. Esta es la razón principal por la que hemos registrado una fuerte demanda de modelos offroad en el mercado estadounidense.»
