Un taller en miniatura… tan real que desearás tenerlo en casa

Aunque necesitarás pulso de cirujano
El mundo del modelismo es tan perfeccionista que siempre busca ir un paso más allá. Por eso no se conforma con “simples” maquetas, sino que intenta recrear situaciones y lugares para dar contexto al objeto principal. En este caso lo hace con la recreación de un taller que cualquiera querría tener en casa.

Como casi todos los hobbies que tenemos los que día a día hacemos SoyMotero.net, el modelismo que nos gusta está principalmente relacionado con los motores en general y con la moto en particular. No vamos a contar muchos detalles de nuestra vida privada, pero aquí el que más y el que menos ha echado sus horas con maquetas. Por si no te habías dado cuenta ya, nos apasionan las motos.

El caso es que entre nuestras aficiones no está tan solo montarlas, sino también ver los trabajos que realizan otras personas con mucho más arte que nosotros. El mundo a escala es tan apasionante que prácticamente no hay límites. No consiste solo en comprar la maqueta y comenzar a trabajar en ella siguiendo los patrones que marca el fabricante, sino que la imaginación y el buen hacer de los mejores son capaces de marcar la diferencia.

En esta ocasión nos hacemos eco del montaje de una impresionante Honda RC166, que va pasando de ser simplemente plástico moldeado a una verdadera moto a la que el paso del tiempo le ha ido afectando. Porque esa es otra, en este caso no estamos ante una recreación de la moto como si fuera nueva, sino que hablamos de un proceso laborioso de envejecimiento con creación de colores incluida para ganar realismo.

Y por si este minucioso trabajo fuera poco, después comienza la creación del taller para la moto. Una joya así no va a quedarse desamparada sin un buen servicio técnico que la cuide como es debido… Empieza la creación de diferentes útiles como un caballete para el carenado, la bandeja para ir dejando los tornillos, las borriquetas para sujetar la moto por los estribos, diferentes cajas para tener todo colocado y muchos más detalles.

El punto de atención al detalle es tan elevado que el banco de trabajo también está creado envejecido como la caja de herramientas, o el barreño metálico donde se guardan los productos de limpieza de la moto. Incluso hay una caja de pañuelos desechables para limpiarse las manos. Y cuando uno piensa que el detalle no puede ir más lejos es cuando se fija que el suelo tiene machas, y que debajo del banco hay varias cajas de Amazon (publicidad gratis para la empresa del Hank Scorpio real) e incluso tres cajas de Tamiya con supuestas maquetas de la moto. Una auténtica pasada ante la que no queda otra que postrarse y dejarle una rosa en reconocimiento.

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