Solo hay que viajar unos meses en el tiempo para encontrar la última vez que un piloto de MotoGP se subió a un coche de F1 y esos mismos meses para encontrar al último piloto de F1 que se atrevió con una moto de la categoría reina. Pasó a final de la temporada 2019 en Valencia, cuando Valentino Rossi y Lewis Hamilton intercambiaron sus monturas. Precisamente fue Valentino Rossi el último que estuvo a punto de seguir los pasos del protagonista de esta historia, John Surtees.
El piloto británico, nacido en el condado de Surrey (Inglaterra) en 1934 y al que perdimos en marzo de 2017 cuenta con un palmarés envidiable. Fue Campeón del Mundo de 500 cuatro veces y tres en 350 en los albores del Mundial del Motociclismo. De hecho fue uno de los pilotos de referencia en la segunda mitad de la década de los ’50 del siglo pasado. A los mandos de una MV-Agusta y cuando los Mundiales duraban entre 7 y 9 carreras, fue el dominador absoluto.

Tal era su dominio que el año de sus dos últimos mundiales en 500 y 350 los combinó con su primera aparición en el Mundial de Fórmula 1. Hablamos de 1960, una época en la que los calendarios eran mucho más recogidos y los acuerdos de patrocinios y marcas también eran diferentes. Pues bien, ya en aquella primera temporada de F1 logró un podio en su segunda carrera, en Silverstone a los mandos de un Lotus mientras que en las otras tres se retiró.
Un palmarés de ensueño
En 1961, con 27 años, dejó el Mundial de Motociclismo con un bagaje increíble: 38 victorias, 45 podios, 34 vueltas rápidas y ocho títulos ¡en 51 Grandes Premios! para dedicarse en cuerpo y alma a la F1. Su primer año no fue especialmente bueno, pero en el ’62 y ’63 acabó cuarto sumando más podios y su primera victoria. Sin embargo, el hito que terminó de consagrar a Surtees como un piloto único en la historia llegó en 1964. Aquel año, subido a un Ferrari 158 consiguió su título de Campeón del Mundo de F1 convirtiéndose en el único piloto que, hasta la fecha, ha sido capaz de conseguir el campeonato en las máximas categorías de motociclismo y automovilismo. No solo había sido el mejor en las motos, sino que llegó a los coches para batir a leyendas como Graham Hill, Jim Clark, Bruce McLaren o Jack Brabham entre otros.

Después de aquél triunfal año, John Surtees no volvió a vencer el título, pero alcanzó el subcampeonato en 1966 después de un grave accidente en 1965 en una carrera de la CanAm y continuó compitiendo hasta 1972, las tres últimas temporadas dentro de su propia escudería. Una escudería de F1 que siguió alineándose en las parrillas de salida hasta 1978. Como colofón a su gesta, Surtees subió al podio de las míticas 24 Horas de Le Mans en 1964. Únicamente Mike Hailwood unos años después siguió la estela de John y aunque fue un digno competidor no llegó a alcanzar la gloria en la F1. A día de hoy se antoja prácticamente imposible ver a uno de los pilotos campeones del Mundo de MotoGP saltar a la F1, aunque quién sabe…