Macbor, la firma española fundada en 1999 por el importador Motos Bordoy (inicialmente con modelos infantiles), resurgió con fuerza hace cuatro años para centrarse en uno de los segmentos más competidos de la actualidad, las trail-iniciación, es decir, motos de hasta 48 CV de origen ideales para usuarios con carnet A2. La rival directa del buque insignia del catálogo 2020 es la Montana XR5 500, rival directa de la Honda CB500X (un referente de ventas en esta categoría), sin olvidar la Benelli TRK 502 X.
CARACTERÍSTICAS Y EQUIPAMIENTO
Las principales características de la Macbor Montana XR5, una moto de manufactura china que en otros mercados se comercializa con una marca diferente, pasan por la adopción de un propulsor bicilíndrico en paralelo DOHC 8 válvulas con refrigeración líquida, 471 cc, 47 CV a 8.500 rpm, 43 Nm a 7.500 rpm e inyección electrónica Bosch firmado por Loncin. Declara una velocidad máxima de 175 km/h, pesa 178 kg en vacío (muy ligera) y el consumo medio fijado en nuestra prueba fue de 4,1 l./100 km.
Doble modo de conducción (Safe y Sport), chasis de acero, basculante de aluminio, suspensión Kayaba multirregulable (horquilla invertida de 41 mm y monoamortiguador trasero con bieletas), ABS (2 opciones de funcionamiento, desconectable), llantas de radios descentrados Akront con bujes de aluminio, neumáticos mixtos Metzeler Tourance (sin cámara), discos de freno delanteros lobulados flotantes mordidos por pinzas axiales Nissin y latiguillos metálicos son otros detalles a tener en cuenta.
El excelente equipamiento de serie se completa con un parabrisas regulable en altura (2 posiciones), manillar de conicidad variable regulable en distancia, maneta de freno regulable en distancia, diversas protecciones (carrocería, manos, cárter, chasis, radiador) para no arañar, caballete central, iluminación full-LED, doble toma de corriente (12V y USB), depósito de gasolina de 20 l., estriberas de sierra con goma extraíble, guantera bajo el asiento trasero, parrilla trasera portabultos con asas de pasajero integradas, portamatrícula flotante e instrumentación mixta analógica-digital.
EN MARCHA
Sobre la XR5 te sientes muy cómodo, una moto en la que estás bien integrado y te queda todo a mano. Al poco de rodar con ella hace gala de una manejabilidad fantástica, sintiéndose ágil e intuitiva. Sin duda, el toque deportivo también es marca de la casa.
El motor es tan lineal como progresivo y carente de baches, empuja enérgicamente hasta las 9.000 rpm y hace gala de una suavidad que se agradece según transcurren los kilómetros. Las vibraciones son inexistentes, estira bien y recupera como debe. Está claro que su carácter friendly le hace ideal para todo tipo de conductores, más si cabe con aquellos que acaban de aterrizar en este segmento.
Bien es cierto que, curiosamente, el carácter del motor es prácticamente idéntico circulando en ambos modos de conducción, por lo que fijarlo en Sport para siempre es lo ideal.
Por otro lado, el equipo de suspensión Kayaba de calidad trabaja muy bien, haciendo que el neutro chasis de acero se adapte bien a tus requerimientos. Estabilidad y confianza en cada cambio de dirección, sin extraños ni cabeceos y con transiciones lógicas en tramos revirados.
En conducción off road, la Macbor Montana XR5 permite buenos escarceos por pistas de tierra sin entrar en el plano hard-trail, más enfocado a modelos con llanta delantera de 21″. La llanta delantera de 19″ otorga la confianza necesaria para afrontar con garantía todas las irregularidades del terreno, al tiempo que el trabajo de las suspensiones transmite confianza debido a sus posibilidades de regulación y calidad de horquilla. El manillar es suficientemente alto como para circular de pie sobre unas estriberas pensadas para calzar botas de enduro, mientras que los frenos de dos pistones tienen el tacto ideal en estas condiciones, con un mordiente controlable y dosificable.
Además, la principal característica de la Montana en conducción off road es la posibilidad de desconectar el ABS en la rueda trasera para poder derrapar libremente (botones SET/SEL en la parte superior de la instrumentación), algo poco habitual y que dice mucho de su enfoque aventurero. También es factible la desconexión del sistema ABS en ambas ruedas, algo ideal para los conductores más pro.