Su nombre no podía ser otro que Singer GP Racer en clara referencia por un lado al fabricante de la pieza central de esta pequeña pit bike, el fabricante de máquinas de coser Singer, y por otro Racer pues se trata de una Cafe Racer con todas las letras.
Así el chasis utilizado es el cuerpo de una de estas vetustas máquinas de coser, que aquellos que peinamos ya canas hemos visto en más de una ocasión. A ella se ha añadido un pequeño subchasis y una cuna inferior para anclar el pequeño motor de dos tiempos y el eje del basculante (con dos amortiguadores, como buena Cafe Racer).
Una robusta horquilla, ruedas de pequeño diámetro, semimanillares y una cúpula metálica con faro redondo encastrado así como un colín monoplaza completan un conjunto magnífico, y eso que a la vista de las fotos todavía no está completamente terminado.
Os recomendamos que no os perdáis el trabajo que desarrolla en Gianluca Ferrerini Creations y a los particulares ayudantes que tiene en el taller.