El curioso paradigma del mercado actual de las dos ruedas lo representa a la perfección, dos monturas como son las nuevas Triumph Speed 400 y Scrambler 400 X, que en apenas un año han conseguido enamorar a más de 50.000 aficionados. Es decir, el cliente medio ya no busca, como otrora, motocicletas mega potentes, hiperligeras o supersónicas.
Las exigencias parecen haber cambiado, entre otras cosas, porque los precios de las motos nuevas son bastante más altos que en épocas pasadas. El cliente medio ahora busca otra serie de características, tanto técnicas como de diseño, que satisfagan sus necesidades y gustos personales. En eso Triumph parece haber dado en el clavo con sus novedosas Speed 400 y Scrambler 400.
Triumph Speed 400 y Scrambler 400 X: Sinónimo de éxito
Según el medio indio Indian Autos Blog, la asociación de Triumph con Bajaj le ha traído “más de 50.000 motos Triumph Speed 400 y Scrambler 400 X vendidas en más de 50 países en su primer año”. Tras su lanzamiento oficial el pasado 23 de junio de 2023 en Londres, las nuevas Modern Classic de la marca se han convertido en todo un objeto de deseo de los aficionados.
Ya lo avisaba la marca en su comunicado de prensa oficial durante el lanzamiento de ambos modelos: “Juntos, con una capacidad líder en su clase, tecnología centrada en el conductor y una calidad y un detalle líderes en su categoría, y con un alto nivel de especificación de serie, largos intervalos de servicio y una garantía integral.”
Concluían: “Estos nuevos modelos accesibles representan una increíble relación calidad-precio y llevan el estilo, la calidad y el rendimiento icónicos de Triumph a toda una nueva generación de conductores de Triumph.” Quizás la última línea de este pequeño extracto del texto original defina a la perfección el éxito de las nuevas Triumph Speed 400 y Scrambler 400 X: “una nueva generación de conductores de Triumph.”
Y es aquí donde reside el kit de la cuestión del éxito de ambos modelos y de otras monturas de características similares. Las nuevas generaciones ya no sueñan con cumplir la mayoría de edad y ponerse a los mandos de un pepino de última generación. Primeramente porque legalmente no es posible con los nuevos carnets de conducción que hay establecidos en la actualidad.
Por otro lado, está el precio de las motocicletas de altas prestaciones, del que ya hemos hablado con anterioridad y al alcance de cada vez menos bolsillos. Por último, el uso real que le damos a la moto en nuestro día a día. Es llegado a este punto donde es innegable el equilibrio del que gozan motocicletas como la Speed 400 o la Scrambler 400 X, donde encontramos un buen nivel de prestaciones, así como un equipamiento y acabado muy similar al de sus hermanas mayores.
Todo ello arroja un dividendo igual a 50.000 ejemplares comercializados en sus primeros doce meses de vida, aunque todo hace pensar que este es el principio de una nueva era dentro de la marca y, por supuesto, en términos generales del sector.