Bultaco Matador. Un nombre sonoro y llamativo que durante muchos años, allá por finales de los 60 y 70 fue conocido por medio mundo. Es el nombre que lucían las primeras Bultaco diseñadas y fabricadas específicamente para enduro… perdón, Todo Terreno, que se decía entonces. Derivaban de las Sherpa, bien entendido que el nombre Sherpa que todos asociamos con el trial, en aquellos años era mucho más que eso. Pero vayamos más despacio.
En 1960, dos años después de inaugurar la marca, Bultaco fabrica ya motos de campo. Son la Sherpa S, una moto destinada a las diversas competiciones off-road que empezaban a organizarse por nuestro país. Al poco tiempo, con esa base se desarrolla la Sherpa N, una moto más básica, pensada para desplazamientos rurales. A partir de ella nace en 1965 la primera Sherpa T, desarrollada con Sammy Miller, que dejará su nombre en la moto que iniciaría una de las sagas más importante de la historia del trial.
Pero al mismo tiempo se organizaban las primeras carreras de TT en España. Y Bultaco estaba allí con algunas de esas Sherpa N modificadas para este tipo de pruebas. Así nace la Matador: la primera TT “de verdad” de Bultaco. Tras ella, Matador Mk2, Mk3, Mk4 y la preciosa Mk5 “Six Days”. Tras ellas, tras el paréntesis de las “Biflecha”, un prototipo de competición para TT que , por cierto, tampoco llego a la serie, aparecieron las Frontera, otro nombre mítico en la marca del dedo rampante.
Las Matador siguieron en catálogo. Se saltaron varios “Mk´s” y con las Mk9 y Mk10, las Matador volvieron a los orígenes, a aquella filosofía de las Sherpa N…con algunos matices. Eran motos que hoy llamaríamos Trail, o más bien “soft enduro” Fáciles, poco potentes, con dos plazas, bien terminadas e igualmente validas para desplazamientos medios en carretera como para tranquilas excursiones camperas. En 1977 salía de las cadenas de producción la última Matador de Bultaco.
A finales de los 90 Bultaco no existe. Derbi tiene los derechos de comercialización del nombre y con él vende una Bultaco Lobito que realmente es una Derbi Senda, con algunos detalles especias. Por otro lado Javier Pérez de Vega y Armando Molí han fundado AJR y con esta marca, en su taller de la Garriga construyen réplicas de las TSS 350 de GP. Motos caras, hechas por encargo, pero más que buenas para correr en clásicas. Pero quieren ir más allá, así que se plantean hacer una moto que llegue a más público, capaz de resucitar la marca. Buscan un motor, llegan a un acuerdo con VOR, un fabricante italiano que fabrica un 4T de 400 para motocross que es una verdadera bestia, capaz de unos 70Cv. Y con una versión de este motor retocada por ellos (entre otros aspectos, con motor de arranque) construyen la original Matador 400 que ves en las fotos. Es una trail, ligera (113Kgs), rápida y que cuenta con componentes de buen nivel, como la horquilla Marzocchi que ves. Tiene algunos aspectos originales, como un hueco para casco bajo el asiento. Recupera los colores y el nombre de las Matador primeras (Mk1, MK2 y Mk3) pero la filosofía trail de las Mk9 y Mk10.
En principio puede parecer que estaba todo listo para relanzar la mítica marca. AJR tenía un acuerdo con Derbi (te recuerdo, propietarios de los derechos de marca de Bultaco) y las Matador 400 se iban a vender a través suyo. El prototipo que ves en las fotos estuvo expuesto en el Salón de Barcelona, pero…
Derbi tampoco estaba en su mejor momento. Piaggio acabó comprando la marca catalana y el proyecto de la Bultaco-AJR–VOR Matador quedó en un prototipo nada más. Desde luego, por originalidad y prestaciones, seguro que esta moto hubiese merecido llevar el nombre de Bultaco. Pero…¿una Bultaco 4T? No se yo.