Cuando se habla de vehículos eléctricos y de su crecimiento exponencial, que en gran medida es impulsado por Estados y organizaciones como la Unión Europea, para reducir la emisión de gases de efecto invernadero, de inmediato se piensa en China, Corea, Japón, Estados Unidos y varios países europeos. Sin embargo, curiosamente, una de las principales transformaciones en la movilidad eléctrica se está dando en un continente que nunca se menciona: África.
Esta transformación se está dando, además, en una clase de vehículo que se ha convertido en un símbolo de la movilidad de los países en desarrollo: la motocicleta. Empresas y gobiernos de este continente están apostando fuertemente a una movilidad cero emisiones a través del desarrollo y la promoción de motos eléctricas, como la que ha diseñado la empresa ghanesa Kofa, y que ha bautizado con el nombre de Jidi.
Jidi: “Diseñado en Ghana. Construido para África”
Kofa se ha asociado con la empresa china de movilidad eléctrica TAILG, para diseñar una moto eléctrica muy resistente, pensada y construida para resistir las duras condiciones de África, climáticas y ambientales. Y es lo que quieren reflejar con el eslogan que encabeza este apartado.
El Jidi utiliza un motor eléctrico central de 72 V, con el que la motocicleta puede alcanzar una velocidad de 85 Km/h, por lo que se puede comparar sin problemas con una motocicleta 125 cc o con un scooter eléctrico. Trae además varios modos de conducción ajustables para optimizar su rendimiento y adaptarla a las condiciones del terreno.
Otro detalle importante de este modelo de Kofa es el de la batería. El Jidi utiliza una batería Kore2, multifuncional e intercambiable, desarrollada por Kofa, que puede dar a la moto una autonomía de 100 km y que se puede cambiar por otra batería con carga, en cualquiera de las estaciones Swap & Go de Kofa, en apenas 30 segundos.
Otros detalles del diseño son su asiento alargado, que permite un segundo pasajero, o la posibilidad de llevar un compartimento de carga. Además, un sistema de frenos combinados y un diseño sencillo para que la motocicleta tenga una vida larga, y sea de fácil mantenimiento.
De acuerdo con Kofa, el Jidi tiene un coste de funcionamiento 30% inferior al de una motocicleta de gasolina. Hay que decir que en su construcción han logrado ahorros sustanciales que pueden ayudar a que esta motocicleta tenga un precio verdaderamente competitivo, aunque todavía no han dicho cuánto costará.
El presente y el futuro de las motos eléctricas está en África
La iniciativa de Kofa en Ghana no es un hecho aislado en África. Hablamos del continente donde la motocicleta es el principal vehículo de transporte y a menudo es el único al que puede acceder la mayor parte de sus habitantes. De ahí que no sea extraño el interés de gobiernos, como los de Uganda y Kenia, por reemplazar millones de motocicleta que funcionan con gasolina por motocicletas eléctricas.
Tan solo en Kenia, el gobierno ha declarado su intención de entregar a la población 1 millón de motocicletas eléctricas y de crear alrededor de 3.000 estaciones de carga.