Terrible noticia para lo que quedaba de la industria de la moto en España: un incendio ha quemado la fábrica de Silence, donde además de sus propios modelos se había empezado a fabricar la Seat Mó recientemente presentada. El fuego se originó la noche del miércoles 4 de noviembre y se extendió rápidamente a las dos naves de la factoría en aquella ubicación, que por suerte no era donde estaba la nueva línea de montaje de motos. Hicieron falta 25 dotaciones de bomberos para controlarlo y aunque no hay que lamentar heridos al ser de noche, sí hay grandes pérdidas materiales. La marca ha comunicado que la línea de montaje de motos eléctricas de Silence se encuentra ubicada en la nueva fábrica de Sant Boi de Llobregat desde el 18 de mayo, por lo que no se ha visto afectada por la situación de la planta de Molins. En estos momentos, Silence está elaborando un nuevo plan de contingencias para poder cubrir con la mayor diligencia todos los pedidos de sus clientes.
Silence se había convertido en el mayor fabricante de motos eléctricas en España. Sus modelos, además del mercado particular, son muy apreciadas por las empresas de alquiler y «sharing»: Acciona, Cooltee, Scoot y otras las usan, además de Correos y acuerdos con varios ayuntamientos. La empresa cuenta con más de 80 empleados y fabrica hasta 10.000 motos al año además de en torno a 12.000 packs de baterías, que en sus modelos se montan de forma modular y facilitan el uso y carga. A falta de conocer más información, precisamente las baterías parecen las primeras sospechosas de haber provocado de algún modo el incendio, ya que el Litio que contienen puede ser inestable y provocar estos problemas, algo que ya vivió el paddock de MotoE como recordaremos.
