La Triumph Speed Triple fue una de las primeras Streetfighter del mercado. Una máquina que destacó por sus característicos faros dobles adelantados, el bloque motor tricilíndrico de alta potencia y la ausencia de cualquier tipo de carenado que ocultara sus entrañas. Con la llegada de la Speed Triple 1050 en 2005, nuestro modelo protagonista y que nos llega vía Bikebound, las cifras alcanzaron los 128 CV de potencia y una velocidad máxima de casi 250 km/h.
Ahora llega lo bueno. Frédéric Lagarde, quien fue ingeniero de competición durante más de una década y lleva 5 años personalizando motocicletas, decidió darle un aire noventero a su naked de Triumph. Frédéric tenía una idea clara en la cabeza y que finalmente ha llegado a buen puerto. “¡La Triumph Speed Triple RC30 es para mí la unión perfecta entre las motos antiguas y las modernas! El objetivo era customizar una moto moderna, con un buen chasis y un buen motor, para que pareciera de los noventa”.

Para comenzar y como habrás podido reconocer en las fotos, el carenado delantero es de una Honda RC30. Para acoplarlo en la moto británica, los mecánicos franceses tuvieron que hacer literalmente “encaje de bolillos”. No fue nada fácil modificarlo para que encajara todo correctamente con los faros y chasis de serie de la Triumph.
Como bien dice su creador: “Quería una carrocería icónica, así que adapté la parte delantera de una Honda RC30. La trasera está hecha a medida, pero inspirada en la Ducati 916”. Es completamente artesanal y como os hemos dicho, llega inspirada en la mítica zaga de la Ducati 916, de hecho, los pilotos son los de la Ducati.
Pero lo que salta a la vista es la combinación de colores, típica de las máquinas de competición de los ingleses. La idea era crear lo que podría haber sido una moto de carreras de Triumph en la maravillosa década de los noventa.

Esta atrevida preparación ahora equipa sendos escapes firmados por el especialista Arrow y un soporte de matrícula personalizado, que está disponible para la venta. Las llantas, pintadas en color oro con neumáticos Pirelli Supercorsa, también estarán disponibles próximamente para la venta en el taller del galo.
Sobre el comportamiento de la Triumph Speed Triple RC30, Frédéric dice: “¡Es bastante radical! Con la posición de conducción adelantada es realmente buena para atacar con fuerza las curvas largas y rápidas. Y, una vez más, ¡el motor de tres cilindros es maravilloso!”.
“Esta motocicleta fue construida especialmente para mí, porque quería tener una máquina decente para rodar. Me gusta ir fuerte, y también me gusta el diseño de los 90. Así que esta moto fue la base perfecta para trabajar. También la idea era conservarla para promocionar mi empresa en varios eventos y mostrar mi estilo y mis habilidades. Quería tener una moto moderna, con un buen chasis y motor, para poder hacer trayectos largos y rápidos, y darle un aspecto “jovencito”, como las deportivas de los noventa. Me encanta el hecho de que mucha gente piensa que es una moto vieja, y solo cuando enciendo el motor se dan cuenta de que es una Triumph. Es genial”.
