Clement y su equipo de Tank Machine han desarrollado esta particular BMW NineT Racer que han apodado “RedLine” y construido en colaboración con BMW Motorrad Francia. Se ha buscado mejorar al máximo la estética, algo realmente complicado cuando hablamos de la BMW NineT Racer. Pero nuevas piezas y una pintura muy acertada pueden obrar el milagro.
Para empezar se trabajó a fondo la parte trasera. Fuera guardabarros trasero, luz y portaplacas y nueva iluminación LED que incluye posición, freno e intermitentes en el propio subchasis. Delante también se optó por algo similar, en este caso recortando el guardabarros delantero y sustituyendo los intermitentes de serie por unos M-Blaze de Motogadget.
La pintura combina los tonos en negros atinado con el rojo oscuro, algo que también se ha tenido en cuenta en el motor. Así ahora incorpora filtros abiertos Unifilters y escape Akrapovic montado sobre los colectores originales, aunque estos han sido cubiertos por cinta anticalórica.
Rizoma cuenta con un amplio catálogo de piezas para la BMW NineT Racer, por ello Tank Machine ha optado por incluir bastantes de ellas: rejilla para el faro, manetas, retrovisores y estriberas. El conjunto se completa con un tapón tipo Monza.
Lo mejor de todo que, como Tank Machine suele hacer en todas sus preparaciones, las modificaciones están disponibles en su web por lo que cualquier propietario de una NineT Racer puede solicitarlas y realizar una réplica a su gusto.