Barcelona contará con el mayor número de puntos de recarga y estaciones de intercambio de baterías para moto de nuestro país. El consistorio, con Endolla Barcelona, sitúa a la ciudad mediterránea a la cabeza en cuanto a electromovilidad en el sur de Europa.
En las ciudades, los puntos de recarga emergen como una necesidad crucial, especialmente para brindar asistencia a conductores de motocicletas eléctricas que carecen de acceso a cargadores privados. Ahora, Barcelona se distingue como una de las urbes líderes en este ámbito en nuestro país, desplegando una amplia red de cargadores en sus calles y estacionamientos.
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Así será la recarga en Barcelona
El impulso lo lidera el ayuntamiento barcelonés con su iniciativa Endolla Barcelona, gestionada por la entidad pública Barcelona de Serveis Municipals. Así pues, el organismo público se enorgullece de haber establecido «la mayor red pública de electromovilidad en España y el sur de Europa«, según afirma el mismo consistorio.
Según datos del último Barómetro de ANFAC, en España existen 16.551 puntos de recarga públicos en zonas urbanas, de un total de 29.301 en todo el país. El enfoque centrado en Barcelona y Cataluña resalta como el más ambicioso, aunque el 83% de estos puntos son de baja potencia (22 kW o menos), alineados con la tendencia nacional.
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Endolla Barcelona ya ha invertido 25 millones de euros provenientes de los fondos europeos Next Generation. Además, planea destinar otros 15 millones en los próximos cinco años para adaptarse al crecimiento de la tecnología eléctrica. La meta es proporcionar una infraestructura de carga accesible, eficiente y fácil de utilizar.
La instalación del punto de recarga número 1.000 en el Mercat de Sant Antoni marca un hito significativo para la empresa. El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, y el presidente de SEAT, Wayne Griffiths, fueron testigos de este hecho. La meta ahora es añadir 2.000 nuevos puntos de carga en los estacionamientos de BSM a partir del próximo año.
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Además de aumentar la cantidad, Endolla Barcelona busca incrementar la potencia de sus cargadores, triplicar la potencia de los puntos de carga en las calles a 160 kW y duplicar la de los ubicados en estacionamientos a 7,4 kW. Esto aceleraría los tiempos de carga y promovería una mayor movilidad . Por supuesto, todo ello utilizando energía renovable al 100%.
El Ayuntamiento de Barcelona avanza en esta empresa gracias a acuerdos público-privados con 10 operadores, entre ellos Bosch, Iberdrola, y Shell Recharge Solutions, para impulsar aún más el desarrollo de la infraestructura de recarga en la ciudad. Además, para este año se prevé crear una red de intercambiadores de baterías para motos eléctricas en los aparcamientos BSM. Iniciativa que irá de la mano con Silence.
