La búsqueda de una moto de ocasión puede convertirse en una auténtica cruzada y por ese motivo hay que tener unas cuantas cosas claras antes. Si no, la cantidad de posibilidades disponibles en un mercado saturado pueden terminar por aplastarte. Así, hay que ir haciendo un embudo virtual que vaya dejando fuera aquellas motos que no se ajusten a nuestras necesidades y acotnado el grupo de posibles.
¿Qué tipo de moto quiero o necesito?
Esta es la parte más “ancha” del embudo. Después de contestar esta pregunta dejarás fuera muchas opciones. De hecho es el camino más sensato, puesto que de una sola de decisión marcamos el camino que vamos a seguir en nuestra búsqueda. Si tienes predefinido un tipo de moto “soñada” será fácil conseguirlo, si no, la siguiente pregunta te ayudará a terminar de tenerlo claro.
¿Para qué voy a usarla?
Si sabes qué moto quieres, este paso es un mero trámite. Si no, será el que te reconduzca al camino de la cordura. Debes definir si se trata de una moto para ir a trabajar, sólo para fines de semana, si la vas a usar únicamente en ciudad o también en autopista o carretera abierta… Esto hará que puedas contestar a la primera pregunta.
¿Qué modelos me conviene más?
Sabiendo el tipo de moto por el que te has decidido, es el momento de comenzar a investigar sobre los modelos que mejor te van a ir teniendo en cuenta tus necesidades. Además, gracias a internet, puedes buscar la información disponible con las experiencias de otros usuarios. Esto es una gran ventaja, ya que sin subirte en una moto podrás saber cuales son sus puntos fuertes, sus debilidades si las tiene, si el mantenimiento es caro o barato, si ha sido un modelo conflictivo en cuanto a averías… Además es una manera infalible de saber si “envejecen con honor” o es un modelo que con el tiempo va a peor.
¿Cual es el presupuesto?
Ya sabes el tipo de moto que quieres, tienes claro la horquilla de años que te valen y sabes el modelo exacto. Perfecto, tu moto nueva está a un paso, pero las opciones siguen siendo muchas. Es el momento de filtrar por presupuesto. Si tienes claro cuanto puedes gastar vas a continuar allanando el camino. Eso sí, que una moto de segunda mano sea más cara que otra no tiene nada que ver con su estado o calidad. Recuerda siempre que es un precio libre, por lo que su valor lo dictamina su propietario y no la realidad de esa unidad en concreto.
Detalles de la moto
Estamos ante el último, pero no por ello menos importante, paso antes de ir a ver la moto y comenzar la decisión final. Cuanta más información tengas sobre la moto mejor. Las fotografías con detalles, las descripciones precisas, las opciones de financiación o garantías si el vendedor es un profesional… Todo cuenta, todo es importante y nuestro consejo es que no dejes nada al azar.
Una vez que has contestado a todas las preguntas anteriores, has dejado de lado tu corazón para que hable la razón y has dado con la moto que buscabas, solamente te falta ir a verla y probarla. Si en directo es lo que esperabas, ¡enhorabuena! Si no, no desesperes y sigue buscando.