El último fin de semana de carreras que hemos vivido, por el momento, tuvo momentos de alta tensión en las dos categorías más pequeñas tanto del Mundial de Superbike como del Mundial de MotoGP. En Supersport300 la sangre no llegó al río pero vimos acciones reprochables y en concreto una (la que ilustra esta noticia) que protagonizó Bahattin Sofuoglu acorralando contra el muro a Íñigo Iglesias. En Estados Unidos, en Moto3, vimos un accidente de esos que ponen los pelos de punta cuando Deniz Öncu tiró en plena recta a Jeremy Alcoba propiciando una caída múltiple que, por suerte, se saldó sin mayores consecuencias. Como consecuencia de estas dos acciones ambos pilotos han sido sancionados, Sofuoglu perdiendo tiempo y Öncu siendo excluido de los dos próximos GP.
Lo llamativo de este caso es que ambos pilotos forman parte del equipo de entrenamiento de Kennan Sofuoglu, el piloto más laureado de Supersport y, también, uno de los más criticados en su momento por una conducción temeraria e irresponsable, que llevó a otros pilotos a sufrir lesiones como el caso de Julián Simón en el GP de Catalunya de 2011. También forman parte de este equipo el líder del WSBK, Toprak Razgatlioglu, cuestionado igualmente por su agresividad buscando en muchas ocasiones el toque a la hora de adelantar, algo que también se recrimina a Can Öncu en la categoría de Supersport. En resumen, cuatro de los pilotos más agresivos de las parrillas actuales están bajo el mando de un Sofuoglu, que no se ha mordido la lengua a la hora de hablar con los compañeros de Speedweek.com.
El turco ha defendido a capa y espada a sus pilotos dejando claro que se ven influenciados por el entrenamiento que lleva a cabo con ellos en Turquía: «Mis pilotos tienen una sesión de entrenamiento muy intensa, luchamos en cada vuelta. Intentamos atacar sin tocar al otro. Atacar no es fácil, no jugamos, mis pilotos no juegan.” Sin embargo las declaraciones se fueron torciendo cuando metió en el mismo saco lo que está sucediendo en la F1 con Hamilton y Verstappen, comenzando a justificar acciones y culpando al resto de pilotos: “También vemos en la Fórmula 1, el pináculo del automovilismo, que personas como Lewis Hamilton y Max Verstappen conducen de forma muy agresiva. Para triunfar hay que ser agresivo, es parte de este deporte. Hoy los conductores se quejan demasiado «.
Pero Kenan va un paso más allá no sólo justificando el estilo de conducción de sus chicos, sino dando a entender que la única manera que tienen de vencer el resto es buscando que les sanciones: «Para mí, la decisión contra Deniz no es justa. Solo hay que mirar los vídeos, veo maniobras mucho más peligrosas que las de Deniz. Para mí, la principal razón por la que los pilotos se quejan de mis chicos es porque son muy fuertes. Porque no puedes vencerlos. Entonces buscan motivos para quejarse. Todos lamentamos profundamente la pérdida de Dean Berta Viñales, todos lo sentimos mucho por eso. Pero ahora Dorna ha hecho un ejemplo de Deniz y Bahattin. Demostrar que cualquiera que conduzca de forma agresiva puede ser castigado de esta forma. Pero eso no es justo para mis pilotos. Tienes que ver toda la carrera, cada piloto. Deniz no se merecía eso. Que sucediera esta caída fue muy lamentable. Pero así se hacen las carreras hoy en Moto3 y en Supersport 300. Todos intentan seguir al hombre de delante para utilizar su estela. Una cosa es segura sobre mis pilotos: entrenamos más que otros, trabajamos más que otros y entrenamos en condiciones de carrera en cada vuelta. Conducimos agresivamente, ¿verdad? Pero es muy importante para mí que esto suceda sin tocar. Si simplemente persigues a tus oponentes, nunca ganarás una carrera. Un ganador tiene que encontrar la manera de superar al oponente, por ejemplo, con líneas muy cerradas «.
Palabras que no dejan duda de lo que busca en sus pilotos Kenan, que sin embargo tiene razón en que hay otros pilotos igual de agresivos y que hacen las cosas igual de mal. Eso sí, las cifras están ahí y dicen que sus pupilos, en un total de 82 carreras han logrado 13 victorias, 11 de ellas de la mano de Razgatlioglu y dos de la mano de Bahattin Sofuoglu mientras que los hermanos Öncu no han conseguido ninguna. Lo que queda claro es que los cuatro se ven respaldados por su mentor, que parece convencido de estar siguiendo el camino correcto. Una lástima sin lugar a dudas.