Ya anunciamos hace unos meses la nueva ley que finalmente entró el vigor el pasado lunes en Francia. Los motoristas galos pueden ser multados con hasta 68 euros si conducen sin guantes, una nueva reglamentación que no tuvo una buena acogida, ya que se considera la sanción demasiado alta (además de la multa económica, se le retira un punto del carnet de conducir).
Debido a esta imposición, que influye al conductor y al acompañante, la multinacional francesa especializada en la gestión de seguros, AXA, ha repartido en Paris y Marsella miles de guantes a conductores con licencia válida para las dos ruedas de forma gratuita. La iniciativa quiere ayudar a los motoristas a cumplir con esta obligación que ha sido impuesta en un tiempo relativamente corto.
De esta forma, el uso de guantes será tan obligatorio como el del casco, y es que, las manos suelen ser la primera parte del cuerpo en tocar el suelo en caso de accidente. La medida quiere reducir el número de lesiones en manos y muñecas que sufren los motoristas, sobre todo en épocas de calor, donde muchos evitan usar las protecciones necesarias.
Un estudio francés asegura que en el 87% de los accidentes son necesarios los guantes como elemento de protección activa y de ser unos homologados y se esté haciendo un uso correcto de ellos, evitan las lesiones hasta en un 95% de los casos. Esta nueva ley se suma a la que entró en vigor el pasado mes de enero que obliga a los conductores de vehículos de dos o tres ruedas a llevar un chaleco reflectante guardado para ser usado en el caso de una parada en el arcén.
