“Por desgracia, la reacción de nuestros patrocinadores, la principal fuente de ingresos para los equipos independientes, ha sido determinante y resuelta”, explica Forward en un comunicado. “Algunos de ellos han puesto fin a los contratos vigentes y no han completado sus pagos”.
Marco Curioni, director ejecutivo, asegura que “debe ser G.C., que hasta que no se demuestre lo contrario es inocente, quien vuelva con nosotros para ayudarnos a resolver los problemas”, dijo, agradeciendo el apoyo prestado por Dorna, IRTA, todos los miembros del equipo y algunos patrocinadores. Para hacer frente a esta contingencia la decisión inmediata es renunciar al costoso desplazamiento a Estados Unidos, para concentrarse en reanudar su actividad a partir del Gran Premio de la República Checa, el 16 de agosto.
De esta forma, la escudería, tanto en MotoGP como en Moto2, causa baja en Indy y se abre un futuro incierto en torno al equipo y sus cuatro pilotos. G.C. está implicado en un presunto delito de fraude en el IVA y patrocinio ficticio, y está arrestado por las autorizades del cantón de Tizino.