La Copa Burn de Freestyle en Gijón, un clásico en las Navidades asturianas, volvió a lograr un lleno absoluto en un Palacio de Deportes de Gijón abarrotado (más de 5.000 espectadores) que, como suele ser habitual, aplaudieron a rabiar a Miralles, Bizouard y compañía.
En su tercera participación en tierras asturianas, el francés Remi Bizouard logró la victoria de la Copa Burn imponiéndose por primera vez aquí a José Miralles, que ostenta 6 triunfos en esta carrera. Bizouard, que consiguió poner en pie a todo el pabellón con sus espectaculares plegadas, sentenció su victoria con el último salto, un “backflip” de gran dificultad. Tras él, José “Loco Miralles” ocupó el segundo cajón del pódium, seguido de Edgar Torronteras que regresaba a Gijón después de tres años de ausencia.
Aunque los mejores en el salto de altura han sido “Rocky” Florensa y Edgar Torronteras, que han alcanzado los 7.75 metros; la ronda de plegadas y la de Freestyle determinaron las puntuaciones.
El jovencísimo Chris Meyer, que se estrenaba en Gijón, dejó un inmejorable sabor de boca por su gran arrojo y su simpatía, y enamoró al público asturiano y gijonés. Además de espectaculares plegadas, el de Alicante logró dos “backflip” que dejaron a todos con la boca abierta y que le hicieron merecedor del cuarto puesto.
Por su parte, Antoni Navas ejecutó por primera vez un “backflip” en Gijón y fue quinto; mientras que Florensa finalizó en sexta posición.
Destacaron los saltos de Miralles y, sobre todo, de Remi B¡zouard; así como las sorpresas de Edgar Torronteras “E.T”, que incluso deleitó a los asistentes con una sesión de “beat-box”.