2021 nos ha traído un montón de motos nuevas. Bueno, realmente ha sido la Euro 5, pero no importa tanto el motivo como la cantidad de ellas. Pero aun así, el mercado que verdaderamente se mueve es el de segunda mano, y en los últimos años los precios de muchos modelos han subido una barbaridad. Hay demanda, sí, pero también mucho «listo» que cree que se puede aprovechar de ello.
Pero no hablamos de especulación con motos con muy poco uso y bien conservadas (ojalá). Hablamos de gente que tiene motos en el garaje, paradas desde hace diez años, o en un almacén enterrada por cajas y polvo. Pero un buen día se levanta por la mañana, y ya sea porque da el paso o porque se lo hacen dar (para que quieres esa moto ahí si ya no la usas), y decide mirar y ponerla a la venta.
¿Y qué hacer si queremos venderla? Pues anunciarla con alguna foto. Pero no os creáis que la va a mover e incluso quitar la capa de polvo para la foto. Ni de casualidad. La foto va como está, si con suerte se ve media moto ya es suficiente. Y ahora subimos el anuncio, explicando qué es lo que vendo. Y a veces, a uno le apetece colgarse del marco de la puerta y dejar de sufrir.
Kavasaki, Susuki, Onda (como la de David y Goliat), encadenados… y si acierta con el modelo, ya nos podemos dar con un canto en los dientes. Nada de kilómetros ni de año, ni si tiene algo modificado o desperfectos. Pero, ¡si hasta he colgado una foto para que se vea! Es una moto, tiene dos ruedas, no sé qué más se puede necesitar.
Por supuesto, no puede faltar alguna mítica frase. ¡Nunca circuito! Pero si es una SR250, no la veo yo muy deportiva la verdad… Y la mejor: se paró funcionando. Nos ha jodido. Todos los motores se paran funcionando, sería imposible lo contrario. ¿Se paró.. parada? No lo veo. O se para porque has quitado el contacto o porque una válvula mira a Cuenca, pero hasta ese instante estaba funcionando. Fijo.
Pero falta lo más importante: el precio. A ver, vamos a mirar algún modelo parecido. Ostras, este está a 4.000 euros, y este a 3.500 euros… este a 1.000, pero debe ser que necesita dinero y la quiere vender pronto. Yo no, no tengo prisa así que 3.500 está bien, que no está tan bien como la de 4.000 euros que dice que tiene la ITV y la mía no. Arreglado, a ver si me llaman…
Y pasa que alguien busca una moto de segunda mano, y va mirando anuncios y da con este. Y ve la moto y empieza a pensar: hay que cambiar neumáticos, todos los líquidos, la mitad de lo manguitos o juntas porque están resecos, la batería, aceite de horquilla.. y luego a ver por dónde empieza a fallar, porque fallará. Y ves que te gastarías como mínimos, otros 1.000 euros y lo que surja. Mal negocio.
A la hora de la verdad, esa moto en ese estado (hablamos de una moto normal, no de una RC45), costaría muy poco. Y aun así se vendería mal porque necesitaría encontrar al comprador adecuado, alguien que la quiera restaurar y tenga tiempo. Y tampoco es que de eso abunde mucho hoy en día. A pesar de que parece que hay más cariño por las cosas materiales que por las personas.
Al final todo se resume en que, igual era mejor ganar solamente 500 euros por algo que no quieres. Ponte en el otro lugar. ¿comprarías esa moto por el precio que pides? Si la respuesta es negativa, mal vamos. Y no, un objeto no cuesta lo que el vendedor quiere sino lo que el comprador/mercado está dispuesto a pagar. Pero esto revienta el mercado. Porque luego vendrá otro, con una moto en buenas condiciones, y dirá: ostras, si esa cuesta 3.500 y se cae a cachos, la mía no baja de 5.000 euros. Y al final es la pescadilla que se muerde la cola, porque se inflan los precios y el mercado se paraliza.
Pero bueno, es algo que ocurre con demasiada asiduidad en España, y da igual que sea una moto que una PS2 llena de moho y que lleva 15 años en un sótano. Eso por lo menos vale 50 euros aunque no sé ni tan siquiera si funciona. La economía se mueve si se compra y se vende, no solo si se anuncia pero nadie puede comprar nada.
